jueves, 14 de enero de 2010

La amenaza invisible



Si les digo que Kurt Westergaard ha sufrido un ataque en su casa ¿les dice algo?
¿Y si digo que fue el polémico autor de las caricaturas de Mahoma mejor? Un fanático de ascendencia somalí se infiltró en su jardín con un hacha y un cuchillo a la antigua usanza dispuesto a degollar a su interino enemigo. Afortunadamente las fuerzas del orden lo redujeron y consiguieron salvar al dibujante y a su hijo de 5 años que se hallaba en la casa. Según he leído hoy en el periódico el caricaturista danés lleva recibiendo amenazas desde su gracieta en el 2005. Un poco caro el precio. Esta no es más que la más ínfima de las muestras del extremismo religioso de los países musulmanes. Y es que parece mentira que esto ocurra en el siglo XXI. Tan ufanos de nuestros avances, de haber investigado el espacio, de inventar cientos y cientos de remedios contra las enfermedades de forma altruista (no lo puedo decir sin reírme) y de dominar el acero y todas sus aplicaciones y continuamos adorando a seres invisibles e incluso asesinando en su nombre. Daría mucho por ver la cara que se les queda cuando mueren en un atentado y llegan al paraíso o donde carajo se merezcan ir y se encuentren con una escena muy diferente a como su querido libro les prometió. Que poco dudamos en mofarnos de las antiguas cultura que enterraban a sus muertos boca abajo para un mejor acceso al inframundo o de los lúcidos griegos que posaban dos monedas en los párpados de los difuntos para Caronte y cuan obvio es lo que se reirán las futuras generaciones.

Religión. Crónicas de la hipocresía. Sacerdotes que roban mucho más que un diezmo, papas que viven mejor que más del 90 % de la población mundial y población que parece olvidar el pasado. Porque no se crean ustedes que únicamente la religión musulmana está supuestamente pervertida. Está muy de moda demonizar a quien conviene. Los islamistas aunque no exentos de culpa no son los únicos engendros de la tierra. El inmolarse en una plaza no dista mucho de quemar a una supuesta bruja con epilepsia u organizar genocidios de pueblos enteros por herejes. ¿Qué os creíais que Hitler fue el único que arremetió contra la estirpe de Israel? Los judíos ya las pasaron putas antes de llegar el demonio germano. Los cristianos los persiguieron y recluyeron en reducidos y mal abastecidos guetos conocidos como “juderías”. Pero ahora no. La Iglesia moderna es más ye-ye y lo único que hacen es alargar sus tentáculos hasta donde la opinión pública, decrecido ahora su fanatismo, les permite. Ahora no matan, ni queman, ni purgan. Ahora solo roban, mienten y extienden la estupidez hasta donde su larga sombra alcanza. ¿Por qué alguien podría ser tan malvado? ¿Por inocencia? A mí me parece mejor el dinero que la promesa de un libro viejo. Porque aceptémoslo. Muchos de los que ellos torturaron en las oscuras y perversas cámaras de la Santa Inquisición era más santos, castos y nobles que sus verdugos. Y así continúan. Son capaces de aplastar al más altruista a fin de conseguir sus fines. Los condones propagan el sida. No me hagas hablar Beni XVI.

Marque una X en la casilla de la Iglesia católica si quiere ser cómplice de esta oscura trama. Yo desde luego solo marcaría esa casilla si garantizase la justicia verdadera empleando la ley que tanto han intentado propagar: ojo por ojo.

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